[LDS] Quinto secreto: Joker

Sólo sé que tengo sueño xD
La tele~
En casa :3


Ciaossu~!!
Terminé Supplier y sigo a full con LDS (sí, ahora lo abrevio porque el título es muy largo xD) :3
Esta semana voy a necesitar más horas >____<; Si desde hoy, que es lunes, me vengo haciendo drama para llegar al fin de semana con todo lo que tengo que hacer, no sé cómo voy a estar de los nervios el jueves Dx
Los dejo con el quinto de LDS :3

Enjoy~ ♥

Título: Little dirty secrets.
Fandom: Johnnys.
Formato: Multi-chaptered.
Género: Smut.
Rating: NC-17.
Estado: Finalizado.
Sinopsis: Una falsa alarma hace que Ryo lo arruine todo. Su impulsividad lo lleva a cometer el peor error.
Nota: Hasta que Ryo y Sho-chan se despiden, la letra en itálica corresponde a los pensamientos de Sho-chan. Cuando se despiden, son los pensamientos de Ryo (soy una persona complicada, lo sé :v)

( Primer secreto: Primera persona )

( Segundo secreto: Antes de la medianoche I )
( Tercer secreto: Antes de la medianoche II )
( Cuarto secreto: Decisión )

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Quinto secreto: Joker.

Saludaba a todo aquel que me encontré en el camino. No tenía la necesidad de dejar de prestar atención a la música que entraba directamente a mis oídos desde mi reproductor musical para hacerlo. Un simple movimiento de mano o una sonrisa expresaba lo que debía decir en ese momento.
Entré al vestuario para encontrarme a un pensativo Ryo. A un ido Ryo. 
No parecía estar ahí, aunque su cuerpo sí lo estaba. 
Cerré la puerta detrás mío, apagando mi reproductor musical con una mano y quitándome los auriculares con la otra.
- Buenos días - Dije. Ryo me saludó con un movimiento de cabeza, pero al darse cuenta que era yo, me di cuenta que giró la cabeza lentamente y me enseñó una expresión de lástima, lo cual me hizo sonreír -. ¿Qué quieres?
- Tienes que ayudarme, Sho-chan, por favor - Me suplicó, levantándose de un salto y acercándose a mí del mismo modo. 
- ¿Ayudarte con qué?
Cuando la puerta se abrió, dando paso, primero a Tacchon y después al resto de los chicos, me di cuenta cuál era su problema: tenía miedo de que Tacchon dijera algo indebido frente a Tegoshi-kun. Sólo atiné a lanzar un monosílabo al aire, el cual pasó desapercibido por el tumulto que se había generado con la llegada del resto de los chicos del grupo. 
Por un momento, no es que haya tenido miedo, sino curiosidad acerca de qué sería capaz de hacer Tacchon cuando la pareja de la persona a quien más amaba, está a menos de cinco metros de distancia. 

Nos cambiamos, nos maquillaron, y nos dirigimos al estudio principal. Allí estaba NEWS... Entre muchas otras bandas y solistas, pero lo que, al menos a tres de nosotros nos importaba en ese momento, era NEWS, y una persona en especial de aquel grupo... O dos. Ryo me advirtió que no sólo Tegoshi-kun conocía todas las excusas que le decía cada vez que se encontraba con Tacchon, la otra persona que también las sabía, era Massu. Prácticamente debía evitar que hablaran con algunos de los chicos, incluso Tacchon, sobre todo después de todo lo que le dije el otro día. Aunque después habíamos vuelto a hablar como si nada hubiera sucedido, estaba realmente preocupado por él y, ahora, también lo estaba por Ryo. El pobre era un manojo de nervios, y eso le era imposible de controlar. Aunque confiara en mí, sabía y sentía que él quería dividirse en dos personas diferentes y ocupar también mi lugar.
Me acerqué a Massu y empezamos a hablar de cosas triviales. Intercambiamos opiniones por unos negocios de moda que habían abierto en el centro comercial cercano a la empresa, a lo que el resto de los chicos de NEWS se unieron al poco tiempo. Estaba estrictamente ubicado para no perder de vista a Tacchon, pero Ryo se estaba haciendo cargo de mantenerlo alejado de Tegoshi-kun, así que me calmé un poco y dejé que la charla siguiera su curso. 
En un momento, alguien del personal me llamó, así que los dejé. Mientras me acercaba a él, me hizo un ademán con la mano, dándome a entender que ya no me necesitaba, pero al volver sobre mis pasos, vi que Tacchon se había acercado a Tegoshi-kun, y pude ver a Ryo intentando ocultar su desesperación por separarlos.
Después de un comentario por parte de Tacchon que ninguno de nosotros llegó a oír, los cuatro integrantes de NEWS voltearon a ver a Ryo al mismo tiempo, con una expresión de sorpresa. Mas Tacchon, volvió al lado de Maru, un tanto alejado de Ryo, con una sonrisa en su rostro. No demostraba ni satisfacción, ni picardía, era una sonrisa indescifrable. 
- ¿Sucedió algo? - Le pregunté al grupo, pero ellos negaron con la cabeza y me sonrieron de lado.
Lo siguiente que supe, era que estábamos grabando, y que Ryo quería terminar con esa presentación de inmediato. 

- Gracias - Me dijo, cuando quedamos los dos solos en el vestuario.
- ¿Por qué? Al final no sirvió de nada - Me sinceré.
- ¿Te dijo Okura qué fue lo que le dijo a Tegoshi? - Me preguntó.
- No, pero... Sus caras eran demasiado serias cuando volví con ellos - Se produjo una pausa. Ryo giró unos noventa grados y agarró su mochila.
- Bueno..., tarde o temprano iba a tener que pasar, ¿no? - Me dijo, completamente resignado, antes de dirigirse a la puerta.
- Oye, Ryo - Al llamarlo, se giró para mirarme -. ¿Qué sientes por Tacchon? - Vi cómo se sorprendió por la pregunta hasta el punto de tornarse pensativo -. Vamos, ¿vas a decirme qué él nunca te lo preguntó? - Agregué, al borde de la carcajada.
- La verdad es que... No. Ahora que lo pienso, Okura jamás me preguntó lo que sentía por él.
- ¿Ni siquiera cuando empezaron con todo esto?
- No, tampoco. Esto simplemente... se dio. Y sin siquiera acordarlo, ambos nos dimos cuenta que no podíamos hacerlo público.
- ¿Y por Tegoshi-kun?
- Lo amo.
- Pues déjame decirte que tienes una forma extraña de amar - Le dije, pero sonreí para que no terminara enojándose.
- Tienes razón, y no te culpo por defender a Okura. Sho-chan, soy plenamente consciente de que estás metido en esto tan hasta el cuello como nosotros. Por eso, te estoy completamente agradecido.
Sin decir nada más, volvió sobre sus pasos hasta tocar el picaporte, pero había algo que tenía atravesado en la garganta desde aquellas últimas palabras, y necesitaba sacármelo.
- Ryo..., ¿estás pensando en separarte de Tacchon?
- No le digas nada, ¿sí? - Me pidió -. Lo haré está noche.

Estaba decidido. Esto no hacía más que darme dolores de cabeza, al fin y al cabo. Lo adoraba, pero también amaba a Tegoshi. Me dolía lastimarlo y me dolería mucho más que él terminara sufriendo por mí. Estaba llegando a la salida cuando oí una voz que me llamaba a lo lejos. Al darme vuelta lo vi llegar corriendo y casi sin aliento a mi lado, extendiéndome lo que parecía ser un libreto.
- ¿Qué es esto? - Le pregunté al morocho que estaba frente a mí, sacándole de las manos lo que llevaba consigo para empezar a hojearlo -. ¿Vamos a trabajar juntos en un drama, Toma?
- No... No es para ti - Respondió, mojándose los labios con la lengua -. Y no es para un drama.
- ¿Y para qué me lo das a mí?
- Es para Tegoshi-kun.
- Ah - Atiné a decir.
- Te vas para casa, ¿no?
- Ahjá. ¿Quieres que te alcance a algún lado?
- No, no hay problema. Tengo un par de cosas más que hacer aquí - Me dijo, hincándose de hombros.
- Ahhh... Debe ser duro seguir siendo un junior, ¿no, Toma?
- Algún día lo pasaré, senpai - Me respondió, enfatizando la última palabra, generando mi sonrisa.
- Bueno, me voy. Es tarde y tengo sueño.
- Cualquier cosa, dile a Tegoshi-kun que en la primera página está mi número de celular.
- Yo lo tengo, si quiere puede pedírmelo a mí - Toma estaba por decir algo, pero lo interrumpí, sonriendo y golpeándolo luego en la cabeza, con el libreto -. Deja de intentar tener algo con mi pareja.
Toma sólo rió, y de esa forma nos despedimos.

El tráfico estaba muy calmado, así que, llegué relativamente rápido. Al poner la llave dentro de la cerradura e intentar abrir la puerta, suspiré al poder hacerlo. Estaba pensando que quizás Tegoshi ya había llamado a alguien para cambiarla y hasta que había aventado mi ropa por la terraza, pero no lo hizo. Hasta que llegué a casa, no hubo ningún cambio. Entré, dejé mis cosas al lado de la puerta junto con mis zapatillas, y vi su calzado en su lugar, lo que quería decir que Tegoshi ya había llegado.
Lo encontré de pie al lado de living, de brazos cruzados. Había estado mirando algo en el televisor. Me di cuenta de eso porque estaba encendido. Me acerqué para darle un beso de bienvenida, pero al hacerlo, mis labios encontraron una de sus mejillas.
- ¿Ocurre algo? - Le pregunté, mintiéndole.
- ¿Por qué no me lo dijiste?
- ¿Qué cosa? - Le mentí de nuevo.
- ¿Por qué me ocultaste algo así?
Suspiré y lancé sobre el sillón el libreto que Toma me había dado.
- ¿Ya lo sabes?
- Okura-kun me lo dijo todo.
- Bueno, entonces, ¿qué más quieres saber? ¿Hace cuánto te engaño? La verdad ya ni lo recuerdo.
- Ryo, sabes que siempre voy a estar aquí para ti, y sin embargo, tú...
- ¡¡Está bien!! ¡¡Está bien!! ¡Ya entendí! ¡Lo siento, ¿de acuerdo?! ¡Tú no tienes la culpa de nada! ¡Tú no tienes la culpa de absolutamente nada! ¡El del problema soy yo! - Hice una pausa. Necesitaba respirar -. No me basta una vida entera para pedirte disculpas, Tegoshi. No quise herirte, pero simplemente..., pasó. Cuando me di cuenta, te estaba engañando con Okura.
Se generó una pausa interminable. Cuando lo miré, estaba con los ojs abiertos como platos y pude ver cómo una fina lágrima caía de sus ojos.
- ¿Qué...?
En ese momento lo comprendí. Lo había arruinado todo. Mi futuro con Tegoshi no lo había arruinado Okura con sus palabras, lo había arruinado yo mismo con mi impulsividad.
- ¿Qué fue lo que te dijo Okura? 
- Me dijo que... estabas enfermo... desde hace un tiempo... Y que por eso siempre llegabas tarde a casa... Qué ibas a su casa para... no terminar desmayándote aquí, pero - Se interrumpió y me miró, negando con la cabeza, mirándome como si fuera la peor mierda que había pisado la tierra. Esa mirada era la que temía, esa mirada me decía que él ya no estaría en ningún futuro para mí -. ¿Cómo pudiste...? - Su susurrante voz me lastimaba. Siempre había pensado en cómo se enfadaría y gritaría al momento de enterarse, pero que actuara de esa forma, sin reaccionar completamente, me dolía todavía más.